Introducción

Cada año, la “cuesta de enero” se presenta como un desafío formidable, poniendo a prueba la resiliencia de consumidores y la astucia de los negocios en el sector retail. Este fenómeno, caracterizado por el apretón financiero post-festividades, no solo tensa los bolsillos de los compradores, sino que también redefine las estrategias de ejecución en punto de venta de los retailers. 

Cuesta de enero 2024: Un Escenario Desafiante

El arranque de 2024 presentó desafíos sin precedentes para el consumidor mexicano. El  Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) vio una variación de 0.89% en enero, por lo cual nos encontramos ante una cuesta más empinada que en los últimos siete años, con una inflación general anual que alcanzó el 4.88%. 

Productos esenciales como el jitomate y la cebolla experimentaron aumentos significativos del 52.14% y 21.17%, respectivamente, mientras que servicios como loncherías y taquerías también vieron incrementos notorios.  Por ello, presentamos un comparativo que no solo destaca las cifras y hechos de enero de 2024 frente al 2023, sino que también disecciona las respuestas innovadoras del sector retail ante estos retos.

Impacto en el Sector Retail

Los aumentos en productos y servicios básicos sugieren un potencial impacto negativo en el sector retail, pues los consumidores podrían reducir su gasto discrecional. Aunque faltan datos específicos del rendimiento del sector durante este periodo, es crucial analizar cómo la reducción en el poder adquisitivo afecta las decisiones de compra y, por ende, las estrategias de los retailers.

Comparativo con enero 2023

En contraste, enero de 2023 mostró un panorama diferente. A pesar de los incrementos en productos específicos como cigarros y bebidas azucaradas, el sector retail experimentó un crecimiento positivo. Los ingresos de ventas promedio en tiendas físicas aumentaron un 29% respecto al año anterior, con ventas totales alcanzando los 121,600 millones de pesos, un crecimiento interanual del 13.8%.

En el dinámico sector del retail, la adaptación a la volatilidad económica y sus efectos sobre el consumo exige una sinergia estratégica y operativa entre diversos especialistas. A medida que comparamos los desafíos y oportunidades emergentes entre 2023 y 2024, se destaca la importancia de una gestión ágil y coordinada, involucrando desde la optimización de la cadena de suministro hasta la diversificación de productos y la mejora de la experiencia del cliente en el punto de venta.

Anticipación, clave para el éxito ante la cuesta

La navegación exitosa a través de estos periodos desafiantes se sustenta en la capacidad de anticipar cambios en las preferencias de los consumidores y ajustar rápidamente las estrategias operativas y de surtido. En este contexto, la colaboración entre Gerentes de Categoría, Analistas de Cadena de Suministro y Gerentes de Operaciones de Tienda se convierte en el eje central para implementar cambios estratégicos de manera efectiva.

Los Gerentes de Categoría, con su profundo conocimiento del mercado y análisis de tendencias, juegan un papel clave en identificar oportunidades para ajustar y diversificar la oferta de productos. Su visión estratégica permite adaptar las líneas de productos a las necesidades cambiantes de los consumidores, asegurando que el surtido en tienda se mantenga relevante y competitivo.

Simultáneamente, los Analistas de Cadena de Suministro trabajan en estrecha colaboración para garantizar que estos ajustes en el surtido de productos se reflejen en una cadena de suministro ágil y responsiva. En el terreno, los Gerentes de Operaciones de Tienda son fundamentales para materializar estas estrategias. Son ellos quienes implementan las decisiones estratégicas en el ambiente de la tienda, desde la gestión eficiente del inventario hasta la creación de experiencias de compra que satisfagan y superen las expectativas de los clientes. 

La experiencia del cliente en tienda, enriquecida por una presentación de productos cuidadosamente curada y operaciones sin fisuras, es a menudo el factor decisivo en la conversión de visitas en ventas.

Esta colaboración estratégica refleja un enfoque holístico para la gestión retail, donde la adaptación y la innovación van de la mano. En este esquema, la capacidad de un retailer para responder con agilidad a la volatilidad del entorno económico no depende únicamente de la eficacia individual de cada especialista, sino de su habilidad para operar como un todo cohesivo. La integración de insights de mercado con operaciones eficientes y una experiencia de cliente excepcional, configura el camino hacia el éxito en el complejo panorama del retail contemporáneo.

Conclusión

La “cuesta de enero” de 2024 presentó retos significativos para el sector retail, contrastando con el crecimiento observado en 2023. Estos cambios subrayan la importancia de estrategias flexibles y orientadas al consumidor para superar adversidades económicas. En Storecheck, continuamos comprometidos con ofrecer soluciones que aseguren la disponibilidad de productos en puntos de venta.

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