En muchas ocasiones, expertos han señalado, incluso antes del COVID-19, que las tienditas van a dejar de existir. La realidad es que no tenemos una respuesta ante ello. 

Lo que sí sabemos es que durante el año en que se presentó la crisis sanitaria provocada por la COVID-19, más de 150 mil pequeños negocios cerraron sus puertas, aunado a la pérdida de más de 2 millones de empleos formales que originó la histórica pandemia, afectando así, al canal tradicional como lo son las tienditas.  

Si bien los retos que el tendero afronta permanecen latentes, el canal sigue siendo relevante para las marcas –ya que representa poco más del 50% de los ingresos de algunos fabricantes–; para el shopper, en cambio, el canal tradicional se mantiene como una alternativa viable, práctica y funcional. No sabemos con certeza si algún día desaparecerá pero sí sabemos que si ocurre, no será hoy, ni en los próximos años. 

Canal moderno y canal tradicional 

A diferencia del canal moderno, en el canal tradicional los productos se adquieren a través del tendero quien es el principal promotor de las marcas y tiene gran influencia en la decisión de compra. El consumidor no puede andar por los pasillos viendo el despliegue de opciones del producto que busca porque normalmente ya tiene identificada la marca y el producto que desea adquirir. 

Aunque cada vez son más los ‘changarros’ que echan mano de la tecnología, es común que no exista variedad en las formas de pago sino que las opciones se limitan al intercambio de efectivo. Entre otras cosas, que no son posibles de realizar como pago de servicios, retiros bancarios y/o recargas telefónicas, etc. 

Ante estas aparentes desventajas, la atención que se recibe es mucho más personalizada. Al ser un negocio local y familiar también suele haber una relación estrecha entre el consumidor y el dependiente. 

De hecho, el 90% de los shoppers que visitan la tienda de barrio son shoppers recurrentes, mientras que el 70% de los tenderos son propietarios, así que el comprador trata directamente con el dueño, de acuerdo con la encuesta Impacto COVID-19 realizada por la ANPEC. 

La vida post pandemia 

Uno de los principales retos derivados de la contingencia sanitaria fue el tema del desabasto, uno de los problemas más temidos por cualquier marca o retail y que afectó enormemente a las tienditas. 

Este término se refiere a la ausencia de producto adecuado en el anaquel, de manera que el shopper no encuentra lo que busca y la marca que lo ofrece pierde la oportunidad de vender y fidelizar a su consumidor. 

A nivel tiendita puede no ser una pérdida económica representativa, si hablamos del beneficio para el propietario únicamente; sin embargo, a nivel región, sumando todos los negocios, el resultado se expresaría en millones de pesos de ventas perdidas para los fabricantes. 

Pero, ¿cómo tomar decisiones cuando existe tan poca información de este canal y aún hay renuencia de muchos tenderos a implementar tecnología? 

Actualmente existen estudios especializados que permiten obtener insights de valor para generar estrategias que realmente cubran las necesidades y aprovechen las oportunidades del canal tradicional. 

Por ejemplo, en un estudio realizado recientemente a nivel nacional para una marca de consumo relevante en su categoría se obtuvo que: 

  • El 32% de las tienditas de barrio no ofrecen ningún producto de la categoría de cuidado personal. 
  • El 59% no manejan ningún tipo de medicina a la venta. 
  • El 64% no vende ninguna bebida alcohólica. 
  • Menos del 1% ofrece la entrega de sus productos a domicilio. 

Estos estudios buscan complementar las necesidades que tenga cada marca, tomando las características propias de su categoría para generar los insights necesarios que beneficien al canal tradicional. Por ejemplo: barrido y muestreo, hábitos de compra, cobertura/precios/visibilidad, pruebas y perfilamientos, geomarketing, perfil del shopper.  

Ya sea para solucionar problemas de desabasto o para implementar una nueva estrategia, entender el canal tradicional con información real es fundamental.  

Es importante señalar que son pocas las marcas que tienen claro el valor de la información real, confiable y actualizada. No es casualidad que sean estas marcas las que más influyen en el shopper, el consumidor y sus clientes ocupando los lugares más importantes en el anaquel. 

En Storecheck estamos comprometidos contigo y queremos ser tus aliados para resolver los retos más difíciles y hacer sobresalir tu marca. 

Solicita más información de nuestros estudios a la medida y permítenos compartirte nuestros casos de éxito, el próximo podrías ser tú: ¿En dónde necesitas visibilidad? ¿Qué información potenciaría tus estrategias? ¿Cómo se vería tu marca ganando participación en un canal tradicional?